La historia de Adolfo egresado de la Universidad Tecnológica de Honduras

Él es Adolfo Enrique Elías Rush, de 25 años, originario del Municipio de Yoro, departamento de Yoro, un ejemplo de perseverancia y que ha logrado salir adelante con la ayuda de sus padres y hermana.

Adolfo es un joven con mielomeningocele, también conocida con el nombre de espina bífida que es una afección que afecta la columna vertebral y suele ser evidente al nacer.

De madre del municipio de Victoria, departamento de Yoro, y padre Yoreño.

Cursó sus estudios prebásicos, primer y segundo grado de primaria en el departamento de Yoro, mudándose a la edad de 9 años a San Pedro Sula, donde reside actualmente, culminando esta etapa de sus estudios y graduándose de Bachiller en el año 2016.

Fueron momentos de gozo, de mucho entusiasmo para Adolfo el poder culminar su educación secundaria.

Con muchos sueños y metas en mente, en 2017 con ayuda de sus padres decidió tomar un nuevo reto, iniciar sus estudios universitarios en la licenciatura de Turismo en el campus de San Pedro Sula.

Alcanzando en 2021 el título de Licenciado en Turismo ya que nos menciona que le gusta todo lo relacionado al turismo, y no se queda atrás el viajar y conocer nuevos lugares.

“Agradezco profundamente a UTH por brindarme una educación de muy buena calidad con catedráticos excelentes y con compañeros que de una y de diferentes maneras me ayudaron a sobrellevar mi etapa universitaria que sin duda para muchos no resulta tan fácil, gracias a todas las autoridades por brindarme su gran apoyo” nos menciona Adolfo.

En el año del 2018, se integra al equipo de baloncesto sobre silla de Ruedas denominado “San Pedro Thunder”, San Pedro Thunder, es un equipo de baloncesto para las personas que nacieron con una discapacidad.

“He tenido la oportunidad de salir de tierras hondureñas y representar al país contra países de la región Centroamericana, Para mí San Pedro Thunder significa mucho, allí logré conocer un poco más sobre el deporte, conocer las historias de mis compañeros, de cómo ha sido su vida con una discapacidad, compartir vivencias entre todos los compañeros, los retos de vivir con una discapacidad, logré ingresar gracias a un amigo de la universidad que conocía a un integrante del equipo y le hablo sobre mí y le dijo que yo estaba interesado en practicar ese deporte y desde el 2018 hasta hoy sigo en el equipo, sigo aprendiendo nuevas cosas”

“Por último, invitar a las personas que tienen algún tipo de discapacidad y  les gusta el baloncesto, que formen parte del equipo, sé que les será de mucho apoyo en lo personal y emocional”

Me despido de todos deseándoles enormemente bendiciones y los dejo con esta frase:

“La vida te pondrá obstáculos, pero los límites los pones tú”